«No es un dato menor. Nosotros estamos permitiendo reproducir el círculo de la pobreza.» Diputada Ana Lía Piñeyrúa.
Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), más de 58 mil niños, niñas y adolescentes uruguayos (5-17 años) realizan actividades peligrosas en la agricultura, ganadería, construcción, industria, comercio, servicio doméstico, entre otros.
“Aquí, hoy niños y niñas trabajan en las ladrilleras, con los carros solos, en los semáforos de noche. Esto implica un riesgo físico y para su seguridad” afirmó Piñeyrúa.
Para la Organización Internacional del Trabajo (OIT), éstas son consideradas peores formas de trabajo infantil ya que “por su naturaleza o por las condiciones en que se llevan a cabo, es probable que dañen la salud, seguridad o moralidad de los niños y niñas.” (Convenio 182 OIT, art. 3).
Esta problemática fue tratada el jueves 28 de julio en la Mesa redonda Trabajo infantil, impacto en el desarrollo del niño (Anexo del Palacio Legislativo). Actividad organizada por el Centro de Estudios y Formación «Josefa Oribe».
Expusieron la Diputada nacionalista Piñeyrúa y la Dra. Alicia Fernández, Presidenta de la Sociedad Uruguaya de Pediatría y Coordinadora General del Centro de Ciencias Biomédicas de la Universidad de Montevideo.
La Vicepresidenta del Centro «Josefa Oribe», Nora Sierra, abrió la Mesa advirtiendo que “la sociedad está dividida entre niños con afecto y oportunidades y otros sin las necesidades satisfechas, con familias fraccionadas y violentas, falta de vivienda, educación y juego”.
IMPACTO IRREVERSIBLE
La Dra. Fernández explicó cómo el derecho a la salud de la niñez y adolescencia trabajadora “es vulnerado en todos los aspectos”.
Estos sufren en el campo de intoxicación por plaguicidas, infecciones parasitarias, enfermedades respiratorias, dermatitis, conjuntivitis y alteraciones lumbares de difícil recuperación, entre otros.
Respecto a la recolección de basura, están expuestos a las mordeduras de los caballos y las ratas que habitan los contenedores. Muchos se caen en los basureros y no pueden salir.
“En el CTI (Centro Tratamiento Intensivo) vemos niños trabajadores de 5 años que fuman. Niños adictos a la pasta base desde los 7 años. Es la única forma de bancar esto” indicó la Dra.
Según la especialista, en estos años han aumentado estos casos. Además, añadió, “vemos muchos accidentados de carros. Hablamos de seguridad en los autos ¿y los carros? Es inseguro que vayan solos en los carros a cualquier hora.” Asimismo, son comunes los accidentes de niños y niñas en la construcción al caer de las alturas.
Para la Dra., hay que considerar que “los niños no son adultos pequeños. A partir de los 16-17 años adquieren características físicas de adultos”.
Además de los daños físicos, su desarrollo educativo también se ve afectado. “La escuela expulsa a estos niños y niñas. Ésta no responde a sus intereses” sostuvo la Dra.
POR LEY
Durante la reunión, la Diputada Piñeyrúa recordó que Uruguay ha ratificado todos los tratados internacionales contra el trabajo infantil. Por ello, el Estado contrajo la obligación de prevenir y eliminar el trabajo infantil.
En 1977, ratificó el Convenio 138 OIT sobre la edad mínima al empleo. Se establecieron los 15 años como edad mínima para trabajar en el país (Código de la Niñez y Adolescencia de Uruguay, art. 162).
Sin embargo, en ningún caso, pueden realizar trabajos que afecten a sus derechos a la educación, salud, a jugar, descansar, vivir en un ambiente sano, estar con sus familias, entre otros, establecidos en la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño (ratificada por Uruguay en 1990).
ACCIONES POSITIVAS
Piñeyrúa, quien trabajó 9 años para la OIT, señaló al Programa Proniño de Fundación Telefónica como ejemplo de «iniciativa privada internacional muy positiva que trabaja con las escuelas, niños, niñas y padres». Subrayó la labor de «convencer a los padres» para que la erradicación del trabajo infantil «tenga éxito».
Desde el Estado, se está revisando el listado de trabajos peligrosos, ya plasmado en resolución del INAU de 2006. Se busca consagrarlo en decreto del Poder Ejecutivo, en aplicación del Convenio Nº 182 OIT sobre las peores formas de trabajo infantil.
Paralelamente, el Estado, empresarios y sociedad civil, juntos están elaborando un Plan Nacional de Acción para erradicar el trabajo infantil en la recolección y clasificación de residuos. Un proceso interinstitucional del Comité Nacional para la Erradicación del Trabajo Infantil (CETI).
Cada12 de junio, se conmemora el Día Mundial contra el Trabajo Infantil. En 2011, la OIT hizo un llamado urgente contra el trabajo peligroso que afecta a unos 115 millones de niños y niñas en el mundo y a 9.4 millones en Latinoamérica y el Caribe (Informe Mundial OIT-2010).
“Éste es el momento, hay que hacer las cosas. El futuro de los niños es siempre hoy” concluyó la Dra. Fernández.
Redacción: Agencia Voz y Vos, Cristina Polo
Fundación Telefónica-Proniño
Desde el año 2001, Proniño, programa de acción social de Fundación Telefónica, enfoca sus acciones en la prevención y erradicación de situaciones de trabajo infantil a través de la educación y el acceso a la tecnología. Este año, en Uruguay, el programa abarcará a 9.000 niños, niñas y adolescentes, en más de 120 centros de educación en los departamentos de Montevideo, Canelones, Treinta y Tres, Paysandú, Maldonado y Rivera.