El Ministerio de Desarrollo Social (Mides) y el Ministerio del Interior (MI), vienen trabajando de manera coordinada en una propuesta de abordaje en el marco del proyecto de gobierno “Estrategias para la vida y la convivencia”.
Se trata de intervenciones puntuales en determinadas zonas de Montevideo y Canelones, en las que se prevé invertir en infraestructura social y equipamiento, profundizar el acceso a los servicios sociales básicos y promover la capacitación de jóvenes y mujeres jefas de hogar.
Se busca a su vez generar un diálogo entre las distintas carteras, que en ocasiones llegan a la misma población sin ninguna coordinación previa.
“El proyecto que se planteó surge de una preocupación (…) de cómo se estaban produciendo distintas situaciones de convivencia y cómo se reflejaba eso en el uso del espacio público”, explicó Mariana Drago, directora de la Unidad Coordinadora de Programas del Mides. La jerarca señaló que se parte de una concepción que pretende una comunicación constante entre las propuestas y el territorio en el que serán aplicadas. “Cada zona tiene sus particularidades (…) No concebimos plantear los programas si no estamos en contacto con las demandas del territorio”, explicó.
En Montevideo se trabajará en cuatro zonas (Cantera del Zorro, Ituzaingó, Marconi y La Chacarita) y en Canelones en dos (Barros Blancos y una segunda zona a definir).
A partir del diagnóstico previo, realizado en base al censo del Instituto Nacional de Estadística y a relevamientos del Mides de los años 2011 y 2012, se estima que se trabajará directamente con más de 20.000 personas de unos 6.000 hogares. De esa población, más de 6.000 son niños y niñas menores de cuatros años, de los cuales uno de cada seis no concurre a ningún centro de primera infancia. A su vez, más de 1300 personas de entre 14 y 24 años no estudian ni trabajan. Entre los hogares, 300 están en situación de emergencia habitacional.
No obstante, se constató una buena presencia estatal en relación a la cantidad de servicios presentes en la zona. “En principio parecía que faltaba presencia del Estado en esas zonas donde se iba a intervenir y en realidad nos dimos cuenta de que lo que falta es coordinación en diálogo y modalidad de trabajo (…) De ahí que sostenemos que hay que profundizar los programas prioritarios”, señaló.
Se estima que el abordaje llevará un año y medio. Entre los objetivos prioritarios está alcanzar que el 100% de la población tenga su identificación y que el 70% de las personas mayores de 15 años que no saben leer y escribir se alfabeticen. Además, se desarrollarán estrategias para disminuir los índices de repetición en Ciclo Básico.