Publicado el

“El Viaje hacia el Mar”

Primer campamento en la playa con familias del Programa Proniño-El Abrojo.

“Todo lo triste lo dejo en el mar, como la depresión y la violencia. Al volver a casa, veré todo más positivo. Seguiré buscando trabajo, algún día lo encontraré”. Nora, 49 años, Las Piedras.

Es la primera vez que Nora sale de la ciudad de Las Piedras y la primera vez que ve el mar. Dice que las olas le han calmado pero tiene las piernas doloridas de tanto bailar y caminar durante el campamento, “como cuando tenía 10 años”.

Nora, sus 2 hijas y 3 nietas, fueron una de las 30 familias, unas 150 personas, que participaron en el campamento organizado por Proniño-El Abrojo. Un Programa socio-educativo de Fundación Telefónica que, en alianza con El Abrojo y otras organizaciones, busca prevenir y reducir el trabajo infantil con familias en contexto crítico.

Cada año, El Abrojo lleva a cabo con las familias del Programa salidas recreativas. Este año, “queríamos ir a más, plantearnos el desafío de hacer un campamento de convivencia familiar en la playa” explicó Alejandro Hernández, educador del Programa.

La actividad se realizó del viernes 28 al lunes 31 de octubre, en el camping El Hidalgo de La Floresta, Canelones. Compartieron esta experiencia familias provenientes de Las Piedras (Canelones) y los barrios de Montevideo de Paso Carrasco y el Centro. Divididos en dos grupos según zonas, participaron del campamento dos días cada grupo.

Según la coordinadora de Proniño-El Abrojo, Adriana Briozzo, el campamento apuntaba al encuentro familiar fuera del ámbito comunitario y de la rutina. “Promover nuevos vínculos de relación familiar y el disfrute mutuo de hijos, madres y padres, como no lo hacen en sus casas”.

Para las familias, el campamento resultó un espacio de “amistad, buena onda, una oportunidad para conocer a personas del mismo proyecto y un apoyo para salir adelante y estar en familia”. Una de las madres, por ejemplo, declaró haber sido la primera vez que pasaba dos días continuados con su hijo.

100% diversión

¿Qué es lo que más te gustó del campamento? “Todo”, coincidieron en su respuesta madres padres, niños y niñas. ¿Qué hicieron? “Nos divertimos”.

Se realizaron actividades comunes y otras según edades. Los niños, niñas y adolescentes, alejados de un contexto de trabajo infantil, disfrutaron de su derecho al ocio y al descanso. Jugaron en la hamaca, la tirolesa, la playa, a la escondida, pintaron, cantaron, entre otros.

Madres y padres tuvieron espacios de diálogo y participación, facilitados por los educadores. Reflexionaron sobre los límites con sus hijos; el uso del tiempo libre; el consumo de sustancias y otras temáticas.

“Estos espacios rinden más que cuando el equipo visita sus hogares porque están lejos de sus realidades y se abren más” indicó Diego Olivera, coordinador de Proniño-El Abrojo, junto a Briozzo.

En la noche, todos se juntaron alrededor de un fogón a cantar y bailar. “Contaron cuentos de terrores y había un monstruo disfrazado de monstruo” dijo Evelyn, 7 años.

Las actividades, además de la recreación, buscaban promover hábitos de higiene, el respeto y la cooperación.

Este espacio y tiempo de convivencia también fue compartido por el personal de las instalaciones del camping. El encargado, Fernando Moreira, explicó cómo les llamó la atención “el fuerte sentido de colaboración de estos niños. Venían a preguntarte constantemente si precisabas realmente ayuda. No lo hemos visto en otros grupos que han pasado por aquí”.

Aunque Fernando también se preguntaba si este hábito de colaboración es más bien un hábito de trabajo y de obligación de servicio.

Finalizado el campamento, las familias y el equipo Proniño-El Abrojo evaluaron positivamente la actividad. Se lograron garantizar los derechos de estos niños, niñas y adultos a estar con sus familias, descansar, jugar y tener espacios de expresión y participación.

“Ojalá se repita” afirmó Sylvia, madre de 6 hijos.

Redacción: Agencia Voz y Vos, Cristina Polo

TRABAJO INFANTIL:

• Cifras: 9.9% de niños y niñas (5-17años) se encuentra en trabajo infantil en Uruguay, según el Instituto Nacional de Estadística (INE-2010).

• Causas: el desempleo adulto, las situaciones de pobreza, la inaccesibilidad a una educación de calidad, la violencia intrafamiliar, entre otras.

• Consecuencias: afecta al desarrollo físico, psíquico, educativo y social.

• Legislación vinculada: Convención sobre los Derechos del Niño, Código de la Niñez y Adolescencia, Convenio 182 OIT sobre las peores formas de trabajo infantil, Convenio 138 OIT sobre la edad mínima de admisión al empleo.