Ayer el Poder Ejecutivo aprobó el proyecto de ley de Servicios de Comunicación Audiovisual (SCA) y fue enviado al Parlamento para su estudio. El texto establece la regulación de publicidad dirigida a niños, niñas y adolescentes así como la promoción y protección de sus derechos.
El proyecto apela al Código de la Niñez y la Adolescencia (CNA) y determina que todo menor de edad tiene derecho a que se respete su vida privada en todo momento y especialmente en circunstancias donde sus derechos hayan sido o estén siendo vulnerados. “En todos los casos los servicios de comunicación audiovisual se abstendrán de difundir nombre o seudónimo, imagen, domicilio, la identidad de sus padres o el centro educativo al que pertenece u otros datos que puedan dar lugar a su individualización”, establece el proyecto.
El proyecto de SCA fija el horario de protección al menor, de 6 a 22 hs.; los canales abiertos y las señales para abonados que tengan sede en Uruguay, deberán adaptar sus contenidos para que sean aptos para todo público y promuevan la educación, información y la cultura. En esta franja horaria no se podrá emitir programación que contenga violencia excesiva, pornografía, explotación sexual comercial o delitos sexuales, programas que fomenten el erotismo, la degradación sexual, los juegos de azar, las apuestas y el consumo abusivo de drogas legales e ilegales.
En cuanto a la publicidad, sostiene que ésta no deberá incitar directamente a niños, niñas y adolescentes a comprar o adquirir ciertos bienes y servicios “aprovechando su inexperiencia o credulidad”. El proyecto hace énfasis en que la publicidad “no deberá discriminar ni promover valores o roles estereotipos que fomenten la discriminación por género, raza, etnia, orientación sexual, discapacidad o de cualquier otro tipo”. Además los niños menores de 13 años no podrán participar de publicidades recomendando productos o servicios a no ser que se trate de servicios públicos de salud, educación o cultura.
El proyecto de ley SCA también promueve la producción nacional y la emisión de contenidos uruguayos: 60% en la televisión y 30% en radios. Además se limita la concentración de medios de comunicación por titular buscando evitar monopolios. “No se podrá ser titular, ni total, ni parcialmente, de más de tres medios audiovisuales, ni de dos medios en una misma banda”, señala el texto.
Se establecen sanciones en caso de incumplimiento de la ley que van desde observaciones hasta la revocación de la licencia de titularidad.