El Comité Técnico Consultivo sobre Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes, Libertad de Expresión y Medios de Comunicación (CTC), presenta hoy las recomendaciones sobre los contenidos de los medios de comunicación y la publicidad en programas infantiles o protagonizada por niños, niñas y adolescentes.
El informe será entregado a Presidencia, que evaluará cuáles de estas recomendaciones podrán integrar la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual.
Se definió que dentro del horario de protección al menor –que irá de 6 a 22 horas-, no podrán emitirse programas que contengan “violencia excesiva” y “truculencia”, entendiéndose la primera como la “explícita utilizada de forma desmesurada o reiterada, en especial si tiene resultados manifiestos de lesiones y muerte de personas y otros seres vivos (asesinatos, torturas, violaciones, suicidios o mutilaciones)”. La “truculencia” refiere a la “presentación de conductas ostensiblemente crueles o que exalten la crueldad”, como la exhibición de cadáveres.
Otra de las recomendaciones apuntan a prohibir en ese horario la exhibición de pornografía y escenas con actos sexuales explícitos, así como el consumo “explícito y abusivo” de drogas legales o ilegales. Tampoco se podrán presentar “como exitosas o positivas”, personas o personajes adictos a las drogas. Lo mismo se recomienda para las conductas discriminatorias.
En lo que respecta a la publicidad, se recomendó prohibir los “chivos” en los programas infantiles. Sobre la participación de personas menores de 13 años en los anuncios, el CTC sugirió que éstos no podrán “recomendar u ofrecer testimonios que respalden productos o servicios”, cualquiera sea su naturaleza, salvo los “servicios públicos de salud, educación o similares”.
La publicidad tampoco podrá dar a entender que el poseer, usar o consumir determinado producto, “concederá” ventajas “físicas, sociales o psicológicas sobre otros”.
El CTC estuvo integrado por representantes del Estado, periodistas, medios de comunicación, Andebu, la Udelar y universidades privadas, Presidencia de la República, Unesco, Unicef y la Agencia Voz y Vos. Todas las recomendaciones fueron alcanzadas por consenso.
