El viernes y el sábado, se realizó el II Congreso Nacional de Educación, que reunió a delegados de todo el país.
La universalización de la educación media, la creación del Instituto Nacional de Evaluación Educativa (Ineed) y la formación docente, fueron los puntos más discutidos de un Congreso que se caracterizó por la escasa participación: 248 delegados de un total de 500 participaron del cierre.
En la comisión que abordó el tema de la universalización de la educación media, se evaluó la posibilidad de volver a un plan único de Ciclo Básico y profundizar en la diversificación de los planes educativos, para adaptarlos a los intereses de los estudiantes.
Según el subsecretario del Ministerio de Educación y Cultura (MEC), Óscar Gómez, la posición mayoritaria consideró que la flexibilización y diversificación de los planes de estudio, son los caminos para contrarrestar los índices de desvinculación de los estudiantes. También se destacó la importancia de coordinar la educación primaria, media básica y superior, para definir mejor los perfiles de los estudiantes.
El debate más importante se dio con la discusión sobre el Ineed. La comisión encargada de trabajar el Sistema Nacional de Educación, dijo que el nuevo organismo tenía “un fundamento tecnicista y empresarial”, destinado a “evaluar docentes y no procesos”. Fue calificado como “un LATU de la educación, que certifica la calidad de lso programas, educadores y centros”. La comisión criticó además que en el Ineed esté representada la educación privada. El director nacional de Educación del MEC, Luis Garibaldi, defendió la creación del organismo, sosteniendo que entre sus fines no está el de “señalar alumnos, docentes, ni centros”. Agregó a su vez, que el objetivo del Ineed es representar a todo el sistema educativo y por ese motivo se incluyó a representantes de la educación privada en la dirección.
Sobre la formación docente, la mayoría se expresó a favor de que ésta se limite al sector público, dado que “las instituciones privadas tienen fines de lucro”.
