El pasado 2 de octubre, el Comité Técnico Consultivo (CTC) sobre los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes, Libertad de Expresión y Medios de Comunicación, debatió una eventual prohibición de las publicidades dirigidas a personas menores de 12 años.
Desde el sector publicitario, manifestaron su oposición y alertaron consecuencias negativas para las empresas uruguayas. De todas formas, la medida no obtuvo consenso, aunque se avanzó en acuerdos tendientes a la co-regulación de la publicidad dirigida a los menores de 12 años.
Patricia Lussich, integrante del CTC y presidenta de la Asociación Uruguaya de Agencias de Publicidad (Audap), manifestó que la decisión de prohibir la publicidad se tomó con sorpresa en la gremial. Recordó que el publicitario es el único sector del país que hoy cuenta con un Consejo Nacional de Autorregulación Publicitaria (Conarp) y “quienes infrinjan ese código que fue establecido de común acuerdo tiene sanciones”, explicó Lussich.
Fernanda Ariceta, presidenta del Círculo Uruguayo de la Publicidad, hizo hincapié en la “falta confianza en la labor del publicitario como profesional” por parte del gobierno, en referencia a que la propuesta surgió desde el representante del Ministerio de Educación y Cultura (MEC) en el CTC, Pablo Álvarez, y es acompañada por el directorio del INAU. “Cuando la publicidad se cuestiona tan férreamente como un elemento que genera únicamente situaciones negativas o nocivas, nos parece una falta de respeto a la profesión” y no se la ve como una “disciplina responsable, avalada institucionalmente”, expresó. Para Lussich, con la postura de prohibición, se “subestima” a los niños y niñas, “creyendo que el discurso publicitario es omnipotente cuando está estudiado en el mundo entero por expertos que no es de esa manera”.
Por otro lado, con esta medida debatida desde el CTC, tanto Audep como desde el Círculo de la Publicidad, advirtieron que las grandes perjudicadas sería las empresas uruguayas, ya que tendría que invertir más presupuesto en publicidad para lograr alcanzar los canales de cable, dado que la prohibición sería sólo para los canales nacionales, quedando por fuera internet y el cable. Mauricio Oppenheimer, secretario de la Cámara de Anunciantes (CAU), hablo del tema y dijo que “con la legislación uruguaya no se puede tapar lo que viene en publicidad en cable o internet, generados en el exterior pero a los que los consumidores uruguayos están expuestos”. En caso de aprobarse la prohibición generaría un “desequilibrio competitivo”.
El Código de Prácticas Publicitarias del Conarp, en un primer apartado del Artículo 14, menciona que: “Los avisos publicitarios no deben abusar de la credulidad de los niños y la falta de experiencia de las personas jóvenes, ni deben establecer un grado de habilidad menor ni un nivel de edad inferior al que efectivamente se requiere en general para el uso o disfrute del producto”. En el tercer apartado hace mención al valor social: “Los avisos publicitarios no deben socavar la autoridad, responsabilidad, juicio o criterio de los padres y educadores, ni deben contener frases mandatarias o compulsivas que insten al menor a obtener el producto por cualquier medio”.
(El Observador, Suplemento Café y Negocios, pág. 6 y 7; 10/10/2012)
